El mundo es más intrigante de lo que se supone, siempre y cuando se formulen las preguntas correctas.
Me refiero al mundo de los negocios. Otro mundo, quizás un mundo por conocer.
En estas pocas líneas aventurémonos a descubrir lo que nos rodea.
Es necesario superar la resistencia, dejarse llevar, abrir la ventana del management y observar, descubrir, analizar lo que está pasando afuera.
La primera gran tarea y desafío constante es abrir una ventana personal, permitir que fluyan libremente las sensaciones, vivencias y emociones latentes en los mercados.
Un rápido vistazo a nuestro entorno, nos permite en una generalización, descubrir que tenemos demasiado de todo. Pareciera que sobrevivirán aquellas organizaciones que logren materializar una receta con ribetes diferenciadores, que la conviertan en única.
Si meditamos un poco, nos damos cuentas que, en su gran mayoría, los productos disponibles en el mercado cumplen a cabalidad la función para la cual fueron creados. Todos los artefactos electrodomésticos funcionan, los teléfonos móviles funcionan, los computadores también, etc. La lista sería interminable.
Ahora bien, asumo que Ud. está pensando en los atributos que hacen que su producto, que también funciona, presenta un desempeño sobresaliente, y es esta característica, en un mundo donde todo pareciera que funciona, lo que le permitirá sobrevivir.
En este mundo, a similares atributos, el valor ya no se encuentra en la esencia misma del producto sino que, lo encontraremos en las ideas, el diseño, el servicio, la orientación al mercado, entre otros factores que, poco a poco iremos revelando.
Depende de ser creativo y ofrecer algo distinto en dos planos que en algún momento se superponen:Primero para atraer y retener empleados con una buena dosis de talento y segundo, para cautivar y fidelizar a nuestros consumidores.
Mente y corazón en una constante búsqueda del cambio. ¡Sin duda una tarea difícil! Pero, afuera en su mundo deambula lo que muchos han descrito como: » El nuevo consumidor » y en dicho contexto, surgen invariablemente las típicas preguntas: ¿qué quiere? ¿qué busca? ¿qué exige? ¿qué … ?
Reflexionemos: ¿Nuevo consumidor?, quizás en su esencia el mismo ser con virtudes y defectos que nos representa a cada uno de nosotros en el desempeño de ese rol. Obviamente lo novedoso está en las respuestas que obtendremos a esas y otras preguntas.
Escucharán conceptos como: calidad, valor, para muchos atributos esenciales a la hora de decidirse. La oferta es tremenda y brutal, las posibilidades de elección múltiples y para todo estereotipo. ¡Que tarea más difícil!
Es por eso que hoy el marketing, del cual me considero un fanático, por ende mis observaciones y apreciaciones quizás carezcan de la suficiente imparcialidad, se ha convertido en una herramienta indispensable en la correcta gestión de los negocios. Marketing no es una moda pasajera. Sin percatarnos, está con nosotros desde siempre, lo pueden palpar, percibir. Existe desde “Adán y Eva”….., si no ,¿Cómo presentar ese primer producto: la manzana , para cautivar? . Entonces, existe desde que el hombre es hombre y convive en interactuaciones constantes. Es la esencia de los negocios y la fuente de la generación de riqueza.
Y, cuando hablamos de negocios, la primera idea que se nos debiera dibujar en nuestro ideal comercial es, sin lugar a dudas la palabra cliente.
¡Fidelizarlos! ¡Rentabilizarlos!, en algún momento acometeremos estos desafíos, sin duda antes de iniciar tamaño emprendimiento será necesario captarlos. Al dragón hay que capturarlo y tal como sucedía en la mitología: no será para nada una tarea sencilla.
Afuera están los dragones y los caballeros con armaduras. ¡Todo un mundo por descubrir!
En esta aventura de variados capítulos que hoy iniciamos, intentaremos juntos darle caza a este dragón.
Recuerden:
«El hombre sigue peleando contra dragones, el único cambio está en el tipo de dragón»
- L. Canepa B.